10 agosto 2004

Long time no see, dear blog!

Pues varias cosas han ocurrido desde la última vez que escribí, la inspiración por fin regresó (o al menos eso creo).

The happiest place on heart! (my ass!)

Pues para cerrar bien las vacaciones el pasado sábado nos lanzamos a Disneylandia: Nidia, Mario y yo (la Idania se desafanó para irse a Las Vegas, pero no la culpo, yo hubiera hecho lo mismo). Pues de ida el Mario andaba algo cansado así que decidí mejor manejar yo de ida y el de regreso, Salímos de Calexico como a las cuatro de la mañana y yo no había dormido nada, y aunque estos dos sopes iban jetones en el camino de San Diego a Anaheim ni sueño me dió. Pues ya llegamos a las siete de la mañana, a reservar hotel y desayunar en un Denny's.

Entrando al parque y la primera sorpresa: El pinche castillo de la Blanca Nieves (o de quien chingados sea...), estaba tapado. Disque según esto le iban a hacer una remodelación total pero estaría así hasta mayo del 2005, la neta se me hizo un chingo de tiempo para ser "gringolandia". Tampoco estaba funcionando el space mountain... anyway, se hace lo que se puede con lo que hay.



Algo con lo que yo no contaba era que en el puto parque no se puede fumar más que en dos o tres secciones que están distribuídas en el parque. Llegue a una y corrí a adentrarme a la sección como todo buen chacoaco empedernido. Pero me dió cura ver a la gente ahí amontonada para fumar. La verdad me sentí señalado y discriminado por mi condición de fumador. Según Nidia y Mario estaba bien eso para no andar contaminando ahí el parque como loco, osea: ¡Es un pinche lugar abierto!, luego entre más pasaba el tiempo me empezaba a valer madre y me soltaba fumando "a hurtadillas", en una de esas que me cacha una morra que trabajaba ahí, me miró se me quedó viendo y solo me sonrió, ¡a huevo!, de seguro era una fumadora que solo dejaba que disfrutara de mi cigarro.



La neta, mientras transcurria el día; llegamos a la conclusión de que tal vez no volveríamos a Disneylandía (al menos hasta que tengamos niños que llevar. La neta estuvo cura pero con el Space cerrado nos subimos varias veces al splash y a la montaña blanca. Entre más pasaba el día, más nos ibamos subiendo a juegos cada vez más ñoños, hasta terminar en el carrousel (¡pena ajena y propia!).



Y así transcurrió el día, hasta que en la noche debido a un capricho mio (porque si por aquellos fuera, nos hubieramos ido ya al hotel), nos quedamos a ver el "Fantasmic"... la neta no se que tiene ese show, yo sé que puede estar muy ñoño y lo que quieran pero siempre que lo veo me divierto mucho.

Saliendo a cenar en el hotel unas hamburguesas del Carlitos JR., un baño y a caer como troncos. A la mañana siguiente salimos y nos dirigimos a pasar un rato en long beach nada más de cura y ya. Mario manejó de regreso, no sé porque pero no se me hace cura manejar en el regreso de un viaje, como que ya pasó toda la cura y todo mundo viene hasta la madre de todo mundo y ya todos cansados.

Así que aquí esta algo de lo más relevante del viaje:

La frase del viaje:
"Estar aquí es como estar desperdiciando la magía del parque"
...Mario en la fila para subirnos al trenecito.

La palabra del viaje:
"Las monastías"
... Nidia (¿quien más?).

Lo más chusco del viaje:
"El tigger tirandome besos, al principio me reí porque me dió mucha cura. Después llegando a Mexicali me dí cuenta en el periódico que uno de los weyes que están dentro del disfraz de Tigger precisamente. Acababa de salir victorioso de una demanda por conducta lasciva (palabra dominguera), con los visitantes del parque; la neta me dió más cura y me sentí ultrajado"

Y porque una imágen dice más que mil palabras, aquí les van miles de palabras:



¿Fiona?


La del recuerdo...



.... Me tengo que retirar porque ya casi entro a la escuela (así es, ya entre a clases; snif snif). Mas tarde o mañana pondre los pormenos del primer día de clases del "divertido y glamoroso mundo CETYS" (con mucho énfasis en las comillas".

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